monumento histórico, hacienda El Abra en Tulancingo cultural

Subiendo por la antigua carretera hacia el noreste, tras un horizonte escarpado, donde crecen nopales y florean las biznagas sus chilitos agridulces acompañados de botones rosados, se yergue El Abra al final de un sinuoso camino, como un descanso, en la cima, rodeado de magueyes guardianes...

[CCO]

¡Con un paisaje histórico celebre su recepción!

A 4 kms del casco urbano del Mpo. de Tulancingo, Hgo., se construyó la Hacienda El Abra en el siglo XIX, en abril de 1878.

Al igual que todas las haciendas de la época, El Abra tiene una capilla consagrada para oficiar.

	Aquí se le rendía culto a la “Diosa Mayahuel”, diosa del pulque de los otomíes, gente que habitaba estas tierras.

El Abra, ideal para ceremonias religiosas en su Capilla y el posterior banquete en alguno de sus salones o jardines.

Su principal actividad fue la cría de ganado bravo, “toros de lidia”, la siembra y explotación del maguey pulquero, bebida que tuvo un gran auge a inicios del siglo pasado.

La Hacienda El Abra ofrece sus servicios para la realización de eventos especiales como seminarios, cursos o convenciones, así como para eventos sociales: graduaciones, aniversarios o reuniones familiares.

Hoy en día, la Hacienda está totalmente reconstruida ya que el paso del tiempo y el abandono del lugar propiciaron una acelerada destrucción del inmueble. Se encuentra ahora en perfectas condiciones para ser usada y disfrutada por los visitantes.

Organice sus campamentos infantiles, retiros, paseos a caballo, ciclismo de montaña, caminatas a campo traviesa, rapel.

Existen documentos donde se hace mención del lugar pocos años después de la conquista, por ahí del año 1540.

Disfrute de actividades ecológicas y del contacto con la naturaleza.

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